Al menos 250 representantes suboficiales y sargentos de las Fuerzas Armadas, en el Estado Mayor, La Paz, la víspera decidieron no dejar pasar la oportunidad para revertir los actos de discriminación que arrastran por años en la entidad castrense.
“Ahora es cuando”, “no hay que suavizar las demandas”, “ya hemos soportado por muchos años”, “basta, es hora de frenar la discriminación”, “estamos unidos a pesar de las represalias”, “nos ampara la Ley 045 y la Constitución”, “no vamos a claudicar” y otras frases se escucharon en la sala.
El Salón de las Banderas, ubicado en las instalaciones del Estado Mayor de Las Fuerzas Armadas (FFAA) quedó pequeño, en la puerta y afuera había decenas de suboficiales y sargentos escuchando las intervenciones; mientras, algunos oficiales que pasaban por el área simplemente miraban y continuaban con sus actividades, cuando la jornada laboral ya concluía.
“La raíz es la colonialidad existente e intacta en las Fuerzas Armadas del Estado, la colonialidad entendida como un sistema en el que existen personas que se creen superiores que nacieron para mandar y otros que han nacido para obedecer; el mando militar no tuvo la voluntad de adecuarse a la nueva Constitución”, argumentó uno de los asistentes.
De acuerdo con algunos militares, hasta el lunes, cuando el Presidente Morales, se reúna con el Alto Mando Militar se vislumbrará sí hay voluntad política del gobierno o simplemente de esquivar la demanda, que el último caso “podría alimentar” más el resentimiento de los sargentos y suboficiales.
“Tenemos sed de justicia, tenemos una frustración acumulada que ¿no puede comprender el bloque dominante? La frustración está en cada uno de nosotros porque la institución no valora nuestras capacidades y si la tenemos se aprovecha de nosotros a pesar de contar una licenciatura, maestría y hasta doctorado, pero nos dicen que somos suboficiales y sargentos”, se escuchó.
Según las intervenciones, las irregularidades e injusticias manifestadas en algunos medios de comunicación son pocos porque hay muchos abusos, incluso denuncias de acoso laboral a algunas mujeres suboficiales y sargentos, en algunas unidades de las Fuerzas Armadas.
A pesar de las llamadas de atención de que “no son civiles y compórtense como militares”, por parte de sus representantes en el Suboficial de Comando de las Fuerzas Armadas, que dirigían la reunión, los asistentes rechiflaron y gritaron “fuera, fuera y fuera” a algunos de sus camaradas que intentaban “suavizar” sus demandas.
Las intervenciones firmes de reivindicación social, laboral y económica de los suboficiales y sargentos fueron aplaudidas y vitoreadas por los asistentes porque muchos de ellos consideran que el presidente y capitán general de las Fuerzas Armadas, Evo Morales, de origen indígena que reclama la restitución de los derechos, no les defraudará.
Por tanto, los asistentes a la reunión reiteraron la solicitud de audiencia con el Presidente Morales, a quién consideran como un hermano, que mediante la voluntad política coadyuve en la incorporación de sus demandas en la nueva Ley Orgánica de Las Fuerzas Armadas (LOFA).
La reunión de los representantes suboficiales y sargentos se efectúo a pesar que un día antes, el 7 de abril, el Comando en Jefe de las FFAA, instruyó el sumario informativo de los presuntos “instigadores” para sancionarles drásticamente de acuerdo a la LOFA, Acuerdo CPM y Reglamento 23.
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